Panadería familiar de Antonio Padrón Jorge, calle San Francisco de La Laguna Muchos panaderos fueron cara visible de distintos espacios políticos y sindicales durante la II República, siendo uno de los colectivos que mayor represión sufrieron en Tenerife. Solo en la CNT había 167 afiliados entre los panaderos de Santa Cruz y La Laguna en 1933 (1). El 27 de abril de 1935 el joven panadero lagunero, Zoilo Afonso Campos, escribía en el periódico En Marcha sobre la necesidad de retomar la labor de la CNT. Decía que “el Sindicato de panaderos de La Laguna está reorganizando, dispuesto a hacerse respetar; a que se cumpla el contrato de trabajo que todos sabéis que no se ha anulado y, en fin, que se nos respete el derecho a la vida”. A sus cerca de veinticinco años denunciaba en ese pequeño artículo la forma en la que algunos patrones usaban a sus empleados, tras terminar el trabajo a las cuatro de la madrugada, “mientras habían de estar durmiendo, han de ir a segar yerba (sic) para las vacas...